Según los medios desplazados desde Moscú, se espera que medio millar de aficionados estén en la capital hispalene en el día del partido y, de hecho, ya se están dejando ver algunos, lo que supone un problema de seguridad para la ciudad teniendo en cuenta los antecedentes. En las redes sociales hay mensajes de hinchas moscovitas buscando entradas, pese a que tienen el acceso prohibido al Ramón Sánchez-Pizjuán.