La situación en el accionariado del Sevilla apuntaba a cambiar muy pronto, ya que un grupo de acciones importantes, concretamente el 12%, propiedad de los americanos, parecía que iba a ser vendida, por la situación de ruina absoluta de la sociedad 777 Partners.
Sin embargo, por ahora su venta está bloqueada, ya que existe una orden judicial, que evita que puedan ser movidos los activos de la empresa. De hecho sus miembros en están citados penalmente, por el departamento de Justicia de EEUU.
Se les acusa de blanqueo de capitales, entre otros delitos graves, una investigación dirigida por el fiscal de Nueva York, Nicolás Roos.
La empresa está en colapso, tras un fraude de más de seiscientos millones de euros y su dueño había dado orden a vender todos los activos relacionados con el fútbol.
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Ahora mismo, ninguna de las participaciones de los clubes podrán ser objeto de venta hasta que el juez del caso Leadenhall dé permiso para ello.
Es cierto que había aparecido alguna oportunidad de vender, pero los compradores no se fiaban, rumoreándose que este porcentaje de acciones lo quiere comprar Fabrice Pastor para entrar en el Sevilla.