Su buen partido en la Copa Libertadores lo hizo, además, ante la mirada de Pep Boada, jefe del Área de ojeadores del Barça, que se desplazó a Buenos Aires para completar un informe exhaustivo de un medio al que también pretenden Sevilla, Porto y Arsenal, clubs que suelen acertar con contrataciones con las que años después hacen caja, precisamente con el Barça.