Es posiblemente una de las causas que puedan explicar que el Sevilla FC no termine de arrancar en el campeonato de la regularidad. Y es que por unas causas u otras, salvo Iván Rakitic, los fichajes estivales siguen sin ser habituales en los esquemas de Julen Lopetegui. En el actual ejercicio el cuadro blanco paga en Liga que los jugadores llamados a dar otro salto de calidad no rindan. En año de Champions, y sin prácticamente haber hecho pretemporada, se hace obligatorio que varias caras nuevas sumen, algo que por ahora ocurre con cuentagotas.