Las finales han llegado a Nervión mucho antes de lo previsto. Y no precisamente para disputar un título, sino para que el Sevilla pueda seguir luchando por su objetivo: una plaza en competición continental. Ocho puntos le separan en estos momentos del sexto clasificado y tiene hasta seis equipos por delante que también pretenden alcanzarlo. La trascendencia del partido de este jueves en Anoeta habla por sí sola.