No hay preocupación en el Sevilla, sencillamente porque en todo este galimatías de la salida del entrenador el club tiene las garantías y la sartén por el mango. En todos los aspectos. Son la AFA (Asociación del Fútbol Argentino) y el propio Sampaoli, que se reunió el pasado miércoles con el presidente, José Castro, los que tienen que dar los pasos consecuentes y legales. El problema, al menos hasta ayer jueves, sigue siendo el mismo: el Sevilla aún no ha recibido notificación oficial alguna por parte de la AFA en cuanto al abono de la cláusula de rescisión de 1,5 millones de euros (a partir del 1 de junio) para resolver el contrato de Jorge Sampaoli, quien tiene una temporada más firmada con la entidad de Nervión. «No sabemos nada», expresaron ayer a este periódico desde la cúpula del consejo de administración del Sevilla.
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