Piotr Trochowski parece tranquilo. No es un hombre que se derrumba fácilmente. Dicen los que le conocen bien en el club de Nervión que debe ser la personalidad alemana…, frío, duro y, por momentos, algo distante. Pero así, sin duda, se prepara de mejor forma para lo que le viene adelante: trabajo, trabajo y más trabajo para volver a los terrenos de juego.