El Sevilla FC cerró el ejercicio 2018-2019 con un beneficio neto de 2,48 millones de euros frente a los 25,7 millones del ejercicio anterior. Es el más bajo desde 2014 debido a que la facturación total cayó un 15,3%, situándose en 196,43 millones. El principal motivo del retroceso es la ausencia en esta ocasión de ingresos por la Champions League. Los pagos de la UEFA bajaron de 48,49 millones a 20,71 millones, debido a que la Europa League es menos lucrativa que el máximo torneo continental. Ello también afectó a la recaudación por socios y abonados, que cayó un 12,8%, hasta 13,07 millones de euros.