A comienzos del verano, Míchel dijo que quería tener a sus órdenes una plantilla corta, de no más de veintidós futbolistas. Sus deseos van camino de hacerse realidad, pues el club tiene el firme propósito de que Coke, Bernardo y Campaña, los tres futbolistas que se han quedado fuera por decisión técnica de las convocatorias de las dos primeras jornadas ligueras, sean cedidos en otros equipos para que dispongan de los minutos que difícilmente tendrán si continúan en Nervión.