Otro de los puntos del acuerdo de Accionistas Unidos con el grupo de Castro, es el compromiso adquirido por el actual presidente y vicepresidente de acometer la compra de las acciones del fondo de inversión americano, para luego repartirla entre los sevillistas que estén interesados.
Para ello se servirán de empresarios sevillanos que buscarán líneas de financiación con la que llevar a cabo la compra de este paquete maldito y desterrar para siempre al capital extranjero del Sevilla FC.