Surge el nombre de uno de sus antiguos pretendientes, un Celta que vuelve a tener un ‘9’ como gran y único objetivo. Si bien el Celta no llegaba este verano a las pretensiones del Sevilla todo podría cambiar en este mercado y también sería el propio club nervionense el interesado en que su delantero no se deprecie más con vistas al próximo verano, cuando a Carlos Fernández sólo le quede un año de contrato y, o sale, o deberán negociar una renovación para que no se escape gratis poco después. Todo ello si Carlos Fernández quiere, que está por ver. Aunque después de una buena experiencia en Galicia (Deportivo), no parece que vaya a hacer ascos a un equipo donde le asegurarían los minutos que aquí no tiene.