El jugador de balonmano Juan Andreu, que presume de su sevillismo en redes sociales, no le perdonaron los colores a lo que sigue y en un partido en Pozoblanco le gritaron «a llorar la Pizjuán», cuando reclamó una acción al árbitro. «Cosas random que te gritan desde la grada una fría tarde de marzo en Pozoblanco…», decía el internacional por España.