El Consejo Interterritorial de Salud ha propuesto que en las actividades deportivas profesionales se vuelva a los aforos restringidos. En concreto, los estadios de fútbol profesional tendrán un aforo limitado del 75%.
En el caso del Sevilla representa que podrán acceder unos 33.500 espectadores, más o menos el número que acudió al partido contra el Atlético de Madrid. Al existir mayor número de abonados que esa cifra, volverán las inscripciones y se limitará la venta de entrada, ya que la prioridad la tendrán los socios.