El ariete de Porto Calvo rechazó todas estas opciones porque no quería una cesión. Sí estaba dispuesto a marcharse, pero traspasado. En el caso del Sevilla, la cesión era con una opción de compra de 12 millones de euros, que era lo que la Real estaba dispuesta a pagar por Carlos Fernández. La operación de trueque con los de Nervión al final tampoco convencía en Anoeta, porque entienden que el valor de marcado actual de Willian José está por encima de esos 12 millones en los que tasaron al punta del Sevilla. El club hispalense, además, se negaba a un traspaso, a un intercambio directo con Carlos Fernández porque la ficha de Willian es muy superior a la del sevillano y no les compensaba en el capítulo económico, aunque sí en el deportivo porque el brasileño gusta mucho a Julen Lopetegui.